Hepatitis A

La Hepatitis A es una infección que afecta al hígado y se ocasiona por el Virus de la Hepatitis A (VHA, o en inglés: HAV). Las infecciones por VHA se dan en todo el mundo, y ocasionalmente aparecen pequeños brotes epidémicos; al año se diagnostican en el mundo 1,4 millones de casos de VHA.

Existen siete subtipos del virus, de los cuales cuatro son capaces de infectar a los humanos, aunque desde hace años existe una vacuna efectiva contra el virus, y en España está instaurada dentro del calendario de vacunación, juntamente con la vacuna contra el Virus de la Hepatitis B.

A diferencia de otras enfermedades hepáticas también causadas por virus como el Virus de la Hepatitis E, la infección por VHA no se cronifica, es decir, el virus causa una infección aguda (que es donde el paciente es contagioso) y luego desaparece del organismo.

En los países desarrollados, la incidencia de esta enfermedad ha ido descendiendo con los años, gracias sobre todo a los planes de vacunación, y a la adopción de medidas higiénicas de la población.

Síntomas

La enfermedad suele aparecer aproximadamente un mes después del contacto con el virus, con un rango de tiempo entre 15 y 49 días. Como ocurre con otros tipos de hepatitis, la infección por el Virus de la Hepatitis A no presenta síntomas específicos, sino que, sobre todo al principio de la infección son síntomas inespecíficos muchos de ellos. Los más frecuentes son:

  • Malestar generalizado
  • Cansancio
  • Vómitos
  • Fiebre
  • Ictericia (piel y ojos amarillentos)
  • Orina oscura

Estos dos últimos síntomas pueden aparecer a medida que la enfermedad ha avanzado más en el tiempo. Y hay pacientes que pueden no presentar síntomas, y dependiendo de la edad del paciente, es más o menos probable de detectar la infección; así por ejemplo un 70% de los adultos sí presentarán algún síntoma, mientras que en niños la mayoría de infecciones son asintomáticas.

Contagio

El Virus de la Hepatitis A se transmite por vía fecal-oral entre contacto de una persona sana con una infectada o bien por ingesta de agua o comida contaminada. Este virus se mantiene presente en las heces de la persona infectada desde semanas hasta cinco meses después de la infección, dependiendo de la edad o el estado de salud de la persona, aunque una persona que no tenga síntomas también puede ser contagiosa si está infectada por el virus.

El no cumplimiento de las medidas de higiene básicas como no lavarse las manos después de ir al baño y entrar posteriormente en contacto directo o a través de objetos contaminados son una fuente a tener en cuenta para el contagio de la Hepatitis A.

Como ocurre con el virus de la Hepatitis B, la mejor manera de evitar contagios, sobre todo si se está en riesgo de contraer el virus, es vacunarse.

 

Tratamiento

No existe un tratamiento específico para combatir la infección por VHA. El curso de la enfermedad suele ser leve o moderado, y no requiere hospitalización del enfermo. Se recomienda hacer reposo mientras la persona sienta malestar y evitar sustancias como el alcohol, que dañan el hígado, así como medicamentos que puedan también afectar este órgano.

Con el fin de evitar contagios, un niño con Hepatitis A se recomienda que no asista a escuela hasta una semana después del inicio de la enfermedad, y minimizar así riesgos.

Prevención

Desde 1995 existe una vacuna que protege frente al Virus de la Hepatitis A, y es efectiva prácticamente el en 100% de los casos. La vacuna se encuentra dentro del calendario de vacunación de nuestro país, y se administra juntamente con la vacuna para la Hepatitis B. Se administra en dos dosis, con un intervalo de entre 6-18 meses de diferencia, y su efecto crea anticuerpos anti-VHA que protegen contra el virus en caso de estar expuesto.

Se recomienda que se vacunen las siguientes personas:

  • Todo aquel que viaje a países donde el VHA es endémico
  • Personas que practiquen sexo oral-anal
  • Personal encargado de manipulación de alimentos
  • Profesionales sanitarios
  • Trabajadores en puericultura

En caso de viajar a un país de las regiones de África, pacífico (excepto Australia), Centro y Sur-América, Asia o el este de Europa, es recomendable estar vacunado des de al menos un mes antes del viaje, y no olvidar administrarse la segunda dosis de la vacuna pertinentemente.